Movimiento Quilombola en Maranhão (MOQUIBOM)
Las comunidades quilombolas afrodescendientes de Brasil se enfrentan a una serie de amenazas en la intersección entre el racismo y el acaparamiento de tierras. MOQUIBOM continúa el legado de la resistencia de la comunidad afrobrasileña al robo de sus tierras y su trabajo y se organiza para conseguir la liberación más allá de los derechos constitucionales formales concedidos sobre el papel.
A lo largo de toda la historia moderna de Brasil, la resistencia ante la esclavitud estuvo marcada por la rebelión de las personas esclavas de origen africano, quienes escaparon y fundaron cientos de comunidades libres en el interior del territorio (quilombos). Los movimientos quilombolas de hoy representan una continuación de estos cientos de años de resistencia y búsqueda de la liberación por parte de la población afrodescendiente de Brasil. Como resultado de la lucha de los movimientos afrobrasileños durante la dictadura militar, la Constitución de Brasil de 1988 establece que les residentes de los quilombos (quilombolas) tienen derecho a un título de propiedad permanente e intransferible de las tierras que ocupan.
Sin embargo, los derechos garantizados sobre el papel no siempre lo están en la práctica. El racismo se ha entrecruzado con el ánimo de lucro y de inversión de las empresas y la clase política a la hora de expulsar a la comunidad quilombola de sus hogares y territorios ancestrales. El estado brasileño de Maranhão registra uno de los índices de conflictos rurales más elevados y violentos, principalmente a causa de los «megaproyectos» agrícolas e industriales que afectan a tierras quilombolas e indígenas.
Frente a estas amenazas, el Movimento Quilombola en Maranhão (MOQUIBOM) se organiza como una articulación estatal de las comunidades afrodescendientes quilombolas de Maranhão. Desde 2006 se organiza en defensa del territorio libre Quilombola con una visión a largo plazo de autogobierno para la comunidad quilombola. MOQUIBOM considera la defensa del territorio como la defensa de un espacio sagrado y la violación del territorio como un ataque a la identidad y a la propia existencia de la comunidad.
El movimiento lucha por el respeto a la identidad y el territorio quilombolas, y contra el abandono y la violencia del Estado. Se opone tanto a los abusos ilegítimos de les terratenientes como a todas las formas de violencia de género dentro y fuera de su movimiento. MOQUIBOM es una organización con diversidad de género, cuyo núcleo son las Guerreiras da Resistência do MOQUIBOM (Guerreras de la Resistencia del MOQUIBOM). Reconocen que la lucha por el respeto a la identidad y el territorio quilombolas debe incluir una perspectiva de justicia de género. En la actualidad, MOQUIBOM lleva a cabo labores de organización en una docena de territorios quilombolas y en más de 60 comunidades.
MOQUIBOM cree que son las propias comunidades las que deben ocuparse de la defensa del territorio. Saben que no pueden esperar a que el Estado proteja sus derechos constitucionales. A pesar de la violencia y el acaparamiento de tierras, las comunidades quilombolas resisten para defender y reclamar sus territorios. Grassroots International colabora con MOQUIBOM mediante recursos materiales para formaciones, movilizaciones y espacios de diálogo.
